Para extraer el gas mediante este método se realiza una perforación vertical, incluso de varios miles de metros, hasta llegar a la roca que lo contiene. A continuación se perfora horizontalmente y se fractura la roca inyectando a altas presiones una mezcla de agua con arena y una enorme variedad de productos químicos muy tóxicos (benceno, etil benceno, tolueno, xileno, naftaleno, acrilamida…) permitiendo la salida del gas.
El Fracking entraña riesgos medioambientales y efectos negativos para la salud humana inaceptables. Destaca la contaminación de aguas subterráneas y superficiales, la contaminación del aire y el suelo por sustancias con reconocido efecto tóxico, cancerígenas, mutagénicas y con efectos sobre la reproducción; presencia de gas en aguas de consumo; generación de cantidades importantes de residuos peligrosos; emisión de metano (gas efecto invernadero) a la atmósfera; afloramiento de metales pesados y material radiactivo. Además puede propiciar terremotos en zonas con riesgo sísmico y supone un consumo de agua significativo, en una zona donde dicho recurso es escaso.
Desde el punto de vista de la rentabilidad energética su Tasa de Retorno Energético es muy baja (TRE 2-3:1) y supone alargar la agonía de los combustibles fósiles, desplazando a las tecnologías renovables y limpias.
En el plano económico es de dudosa rentabilidad, los datos demuestran que el 80% de los pozos estadounidenses no son rentables y que alrededor de la fractura hidráulica, según los expertos, se está levantando una burbuja especulativa.
Según los datos disponibles, en Murcia se han aprobado 4 permisos de investigación cuya área se extiende por los municipios de Caravaca, Moratalla, Calasparra, Cehegín, Cieza, Jumilla y Yecla. Recientemente la empresa norteamericana Oil and Gas Capital a través del proyecto Escorpio ha sido autorizada por el Gobierno Regional a que investigue si hay gas para su explotación en el Noroeste de la Región. También cercanos municipios de Albacete, como Hellín están afectados por permisos de investigación.
Por último , desde ANIDA solicitamos públicamente al Ayuntamiento de Yecla que se muestre contrario a esta técnica extractiva por los perjuicios ambientales y sobre la salud que provocaría y declare al municipio de Yecla Libre de Fracking, como ya han hecho otros municipios. De igual modo exigimos al Gobierno Regional y Central que revoquen las autorizaciones concedidas.
También animamos a todos los ciudadanos y colectivos a mostrar su rechazo a una técnica inadmisible ambientalmente, absurda desde el punto de vista energético y económicamente de dudosa viabilidad.
En Yecla, a 22 de mayo de 2013.
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